La inflamación es un proceso natural que se activa en el cuerpo cuando enfrenta una amenaza, como una infección o lesión. Sin embargo, cuando se convierte en crónica, puede tener consecuencias negativas para la salud. En un artículo revisado por el equipo de expertas de Bloom y con el apoyo de las nutricionistas Carla Romagosa y Patricia Alonso Lovera, se explica en profundidad este fenómeno y se ofrecen consejos sobre cómo prevenir sus efectos dañinos.
¿Qué provoca la inflamación?
La inflamación puede ser desencadenada por diversos factores, entre ellos:
- La respuesta inmune frente a infecciones.
- Estrés prolongado o desequilibrios hormonales.
- Consumo elevado de alimentos procesados o con exceso de azúcar.
Cuando estos factores se mantienen en el tiempo, pueden originar inflamación crónica, lo que afecta a tejidos, órganos y al sistema inmunológico.
Señales de inflamación crónica
A diferencia de la inflamación aguda, que es más evidente, la inflamación crónica puede manifestarse con síntomas como:
- Dolores musculares persistentes.
- Problemas digestivos recurrentes.
- Fatiga constante.
Detectar estos síntomas es clave para prevenir problemas de salud más graves.
Consejos para prevenir la inflamación crónica
El artículo revisado por las expertas subraya la importancia de adoptar un estilo de vida saludable para evitar la inflamación crónica:
- Seguir una dieta rica en frutas, verduras y alimentos frescos.
- Realizar ejercicio físico regularmente.
- Reducir el estrés mediante técnicas como la meditación o el yoga.
Estos hábitos pueden ayudar a reducir la inflamación y mejorar el bienestar general.
Lee el artículo completo en Bloom
Para obtener más información sobre la inflamación y las recomendaciones de las expertas, puedes leer el artículo completo revisado por Patricia Alonso Lovera y el equipo de Bloom: ¿Qué es la inflamción crónica?